Charlamos con Valeria Salech, presidenta de la organización, sobre el rol político de la misma y el pedido para que la ARICCAME se componga por gente técnica y responsable del sector.
En el marco de la apertura de la Expo Cannabis 2022, tercera edición en el predio de La Rural, Valeria Salech, histórica presidente la ONG Mamá Cultiva, subió al escenario con la remera de Argentina y el clásico delantal, en está ocasión rojo.
Luego del acto de reconocimiento a los cultivadores de genéticas registradas por parte de representantes del Estado como Juan José Bahillo, secretario de Agricultura y Ganadería de la Nación, Silvana Babbitt, la nueva presidenta del Instituto Nacional de Semillas (INASE), Gabriel Giménez, Director Federal del INASE, Carolina Galliard, Diputada Nacional (FdT) y el gobernador de la provincia de Jujuy, Gerardo Morales. Micrófono en mano, Salech mencionó que “Mamá cultiva hace política”
-¿Por qué te surgió decir eso?
«Porque estamos en una especie de contexto donde se le baja el precio a la política. Hay un discurso anti-política que no es acorde con los tiempo y a veces no se entienden que las luchas son políticas. Nos dicen que ´somos unas luchadoras´, sí de la política».
“En 2016 le pedíamos a las madres que vayan al consultorio con todo la información que le dábamos y le expliquen a sus médicos que estaban usando cannabis, que ingerían cannabinoides y que existía un sistema endocannabinoide. Armábamos carpetas científicas y las llevábamos a los consultorios. Eso es hacer política, acorralar a lo más alto de la jerarquía».
-¿De dónde vienen los discursos anti-políticas?
«De los políticos que realmente diseñan políticas públicas para sus propios intereses. Creo que hay un sector que sostiene un poder y lo utiliza y hablan mal de la política. Como si los negocios no fueran parte de la política. Nosotras acá estamos avanzando sobre una corporación que se abraza al negocio de la enfermedad y nosotras vamos por la salud, y eso se nota. La enfermedad es un negocio, el ejemplo claro es el HIV».
-¿Tenes miedo que con el cannabis pase lo mismo?
«No tengo miedo, sé que va a pasar. Al menos que intervenga el Estado, para las que nos merecemos estar en la industria cannábica. Por eso dije en el escenario que el próximo es un año electoral y que debemos tener en cuenta que acá hay un Estado presente, porque estaban arriba del escenario diciendo nosotros queremos regular, intervenir».
-¿Las contactaron desde la Secretaría de Industria y Desarrollo Productivo por la redacción de la Reglamentación y la conformación de la ARICCAME?
«La verdad es que yo no espero que nos llamen, porque el Estado sigue siendo muy patriarcal, y la mirada sigue siendo que somos madres. Una vez un empresario nos preguntó con quién podía hablar de negocios, no con las madres, y lo miramos como diciendo nosotras manejamos los negocios. Todavía hay esta cosa de que los negocios se hablan con los varones».
«Pero en la política todavía reina esa mirada. A pesar de que la mayoría de las compañeras son profesionales, que trabajamos en los territorios que capacitamos en universidades. Pero sin embargo todavía reina esa mirada romántica sobre nosotras de la maternidad».
-Es inminente el lanzamiento de la Agencia (ARICCAME), que augurio tenes…
«Los candidatos a la Agencia deben ser personas que están a favor de la regulación y debemos cuidar eso. Espero que haya gente muy idónea, que no se repartan cargos políticos. Tienen que ser muy técnicos para construir. Tiene que ser gente muy responsable con mirada a mediana y largo plazo, que sea del sector, que no venga de afuera acomodada. Que tenga la vocación de hacer del cannabis una industria muy potente en nuestro país y líder en la región. Hay todo para que sea así».
-Por último, hace poco se conformó una Federación Argentina Cannábica como red de organizaciones para enfrentar el mercado industrial ¿Se podría sumar Mamá Cultiva?
«No lo hablamos hacia adentro, nosotros somos de conversar mucho todo. Todavía no fuimos invitadas tampoco. También pesa en muchas organizaciones la mirada patriarcal, y a las mamas no nos ven en ese rubro, pero si hay que estar estamos y sino no pasa nada. Nosotras vamos a seguir con nuestro laburo militante siempre porque nos dedicamos a eso, somos políticas».
«A principio de año nos conformamos como cooperativa justamente porque construimos una empresa social entre nosotras. Presentamos la línea de sustrato y otros productos que hoy podemos vender en la Expo, para darle un valor a nuestro laburo también».