Crearon una trilogía de IPAS. La fábrica de cerveza artesanal nació en Cipolletti y se expande.
Cerveza y cannabis, la combinación llegó una fábrica de Cipolletti que terminó creando una línea de IPAS con esta característica. Fueron las demandas del mercado las que llevaron a la empresa a incursionar con otros productos como: las frutas, los cítricos, los caramelos y, finalmente, los terpenos, o el aroma, podríamos decir, de cannabis. Pero, ¿de dónde salen?.
La cervecería, a partir del 2020, comenzó a trabajar con el agregado de terpenos aromáticos de cannabis sativa. Este nuevo ingrediente permitió crear una trilogía de cervezas diferente a las tradicionales que llegó al mercado hace apenas un año. “En la actualidad la demanda es grande, pero cuando las primeras latas llegaron a los comercios muchos se preguntaban qué era eso”, indicó uno de los fundadores de la firma, Osvaldo Buggiano.
Los terpenos en la planta del cannabis son los responsables de darle el aroma a la planta. Para utilizarlos en las cervezas son extraídos de las hojas del cannabis a través de un proceso que es realizado en Oregon, Estados Unidos.
Desde allí, la empresa importa los terpenos, un líquido, que luego se dosifica en una IPA especial. De característica más suave a la tradicional, con menos grados de alcohol y menos lúpulo, para que pueda sentirse el sabor y aroma del cannabis.
Buggiano, el creador de la idea, expresó que la iniciativa surgió de ir probando diferentes ingredientes. “Llegamos a los terpenos de cannabis porque el lúpulo que es el ingrediente principal de la cerveza es una planta prima del cannabis, por lo que ambas especies tienen propiedades de sabor y olor muy similares”. En la región son la primera empresa en probar con este ingrediente.
Para crear la trilogía de IPAS – O.G Kush, Lemon Skunk y Hippie Crippler– utilizaron tres tipos de terpenos aromáticos que imitan a tres cepas de sativas. El producto en la región es innovador por su nuevo agregado. Buggiano aclaró que la cerveza no tiene ningún componente psicoactivo. Los terpenos se agregan a la cerveza cuando termina el proceso de fermentación y maduración. “Luego se deja un tiempo para darle un toque especial”. Hoy el valor de las latas ronda los $600 y $800.
La fábrica actualmente se encuentra realizando una investigación con otras instituciones, por el potencial que tienen los terpenos, con el objetivo de poder producirlos en el Alto Valle, una vez que la normativa esté regulada. Por ahora aclararon que “no se puede realizar, por el descarte que produce, pero cuando se reglamente estarían dispuestos a hacerlo”, manifestó Buggiano.
Cerveza y cannabis: una fábrica artesanal y original
Hace más de diez años un grupo de amigos de Cipolletti comenzó a incursionar en la creación de cervezas artesanales. A partir de la producción de los primeros barriles surgió Crafter de la mano de Buggiano.
La fábrica desde sus inicios tuvo un único objetivo: crear cervezas especiales y originales, a partir de esa decisión fue innovando con diferentes agregados.
La fábrica se encuentra en un predio de alrededor de 13 hectáreas ubicado en la Ruta 151. La chacra también cuenta con producción una de manzanas y peras que sirven para la elaboración de cervezas.
