Con votos a favor y en contra, en el debate de la Cámara Baja, el proyecto de ley pasa a Alberto Fernández.
A causa del pedido de Frente de todos realizado el pasado 3 de mayo, rápidamente el proyecto de ley que busca regular la producción industrial de la planta de cannabis pasó hoy por diputados. Luego del debate oficial los resultados fueron positivos para este proyecto que favorecerá a la industria nacional y a los pacientes que utilizan derivados del cannabis para su salud.
La iniciativa, propuesta por el Ministerio de Desarrollo Productivo nacional, ya tenía media sanción del Senado (julio 2021) y solo faltaba la aprobación de Diputados. Ahora el presidente de la Nación tiene 10 días para aprobar o rechazar la ley.
Se creará la Agencia Regulatoria de la Industria del Cáñamo y del Cannabis Medicinal (ARICCAME), que tendrá como función regular la importación, exportación, cultivo, producción industrial, fabricación, comercialización y adquisición de semillas, de la planta de cannabis y de sus productos derivados con fines medicinales o industriales. Esta entidad tendrá autarquía técnica, funcional y financiera y orbitará en el ámbito del Ministerio de Desarrollo Productivo.
Al momento de analizar las solicitudes de licencias para producir cannabis la nueva agencia establecerá los requisitos y antecedentes que se le solicitarán a quien corresponda, con el fin de maximizar los controles destinados a prevenir actividades ilegales, incluyendo el lavado de activos.

¿Por qué decirle “si” a esta ley?
La ley vigente frena el uso del cannabis para producir medicamentos, cosméticos, alimentos, materiales de construcción o autopartes, entre muchas otras cosas. Solo está permitido su uso para la investigación y en casos puntuales de salud, pero con un acceso muy restringido y complicado.
La nueva ley integrará una nueva matriz productiva que genera expectativas de crecimiento económico y creación de fuentes de trabajo. A su vez facilitará y disminuirá los costos para las familias cuya salud depende del aceite de cannabis. También se logrará un control de calidad de los productos derivados de este vegetal
El objetivo es brindar un marco regulatorio para la inversión pública y privada en toda la cadena del cannabis medicinal y complementar la actual legislación, la Ley 27.350, que autoriza el uso terapéutico y paliativo del cannabis.
La industria del cannabis medicinal y cáñamo industrial incorpora cerca de 200 productos y servicios asociados en su cadena de valor, es decir que abre una multiplicidad de opciones para desarrollar actividades de servicios y de producción en toda la Argentina.
Según se informó, el potencial económico para el desarrollo de la actividad del cannabis medicinal y el cáñamo industrial para el año 2025 se proyecta en 10.000 nuevos empleos (alto porcentaje en I+D+i), 500 millones de dólares en ventas al mercado interno anuales y 50 millones de dólares de exportación anuales, revelan los datos.