Con 142 votos a favor de los 159 diputados presentes, la reforma sobre la política de drogas en República Checa representa una de las mayores transformaciones del marco penal checo en las últimas décadas. Entre sus principales medidas está la despenalización del autocultivo de cannabis, la promoción de sentencias alternativas y el uso terapéutico de la psilocibina (hongos).
Se espera que el nuevo marco legal, una vez que sea ratificado por el Senado de la Nación, esté vigente desde enero de 2026.
En lo que respecta a cannabis, el nuevo marco legal permitirá cultivar hasta tres plantas por persona, conservar hasta 200 gramos de cannabis seco en el domicilio y transportar hasta 25 gramos.
La medida fue promovida por la diputada Zdenka Němečková Crkvenjaš y se trata de un acuerdo alcanzado tras el rechazo de una primera propuesta más ambiciosa que buscaba regular el mercado de cannabis en el país europeo.
“Fin de los juicios inútiles a personas mayores que cultivan cannabis con fines medicinales. Acabamos de aprobar la posesión doméstica de hasta 200 gramos para uso personal lo que ya no será un delito”, expresó la legisladora a través de su cuenta de X (exTwitter).
La posesión personal de drogas está despenalizada desde 2010 y el cannabis de uso medicinal es legal desde 2013. Sin embargo, y a pesar de la despenalización, aún existe la posibilidad de multas por posesión.